1. ¡Aleluya! ¡Alaba al Señor, alma mía!

1. ¡Aleluya! ¡Alaba a Yahveh, alma mía!

2. Mientras viva yo quiero alabar al Señor, quiero salmodiar para el Señor mientras exista.

2. A Yahveh, mientras viva, he de alabar, mientras exista salmodiaré para mi Dios.

3. No pongas tucconfianza en los que mandan, ni en el mortal, que no puede salvarte;

3. No pongáis vuestra confianza en príncipes, en un hijo de hombre, que no puede salvar;

4. no bien se le va el alma, vuelve al polvo, y ese día se acaban sus proyectos.

4. su soplo exhala, a su barro retorna, y en ese día sus proyectos fenecen.

5. Dichoso aquel que al Dios de Jacob tiene de ayuda y pone su esperanza en el Señor, su Dios,

5. Feliz aquel que en el Dios de Jacob tiene su apoyo, y su esperanza en Yahveh su Dios,

6. en el que hizo los cielos y la tierra, el mar y todo cuanto ellos encierran. El su lealtad conserva siempre,

6. que hizo los cielos y la tierra, el mar y cuanto en ellos hay; que guarda por siempre lealtad,

7. y su justicia da a los oprimidos, proporciona su pan a los hambrientos. El Señor deja libres a los presos.

7. hace justicia a los oprimidos, da el pan a los hambrientos, Yahveh suelta a los encadenados.

8. el Señor da la vista a los ciegos, el Señor endereza a los encorvados, el Señor ama a los justos;

8. Yahveh abre los ojos a los ciegos, Yahveh a los encorvados endereza, Ama Yahveh a los justos,

9. da el Señor protección al forastero, y reanima al huérfano y a la viuda, mas desvía el camino de los malvados.

9. Yahveh protege al forastero, a la viuda y al huérfano sostiene. mas el camino de los impíos tuerce;

10. El Señor reina para siempre, tu Dios, Sión, de generación en generación. ¡Aleluya!

10. Yahveh reina para siempre, tu Dios, Sión, de edad en edad.





“Onde há mais sacrifício, há mais generosidade.” São Padre Pio de Pietrelcina