1. Cántico. Salmo de Asaf

2. Oh Dios, sal de tu silencio, no te quedes inmóvil y callado;

3. mira cómo tus enemigos se alborotan y tus adversarios levantan la cabeza;

4. traman un complot contra tu pueblo, conspiran contra tus protegidos.

5. Dicen: "Venid, borrémoslos de las naciones, que no se vuelva a mencionar el nombre de Israel".

6. Como un solo hombre todos han conspirado y se han aliado contra ti:

7. las gentes de Edón, los ismaelitas, Moab y los hijos de Agar,

8. Gebal, Ammón, Amalec, Filistea y los habitantes de Tiro;

9. hasta los asirios se han unido con ellos y son el brazo fuerte de los hijos de Lot.

10. Trátalos como a Madián y como a Sísara, como a Yabín en el torrente Quisón,

11. que fueron aniquilados en Endor, y pararon en estiércol de la tierra.

12. Trata a sus jefes como a Oreb y Zeb, y a todos sus caudillos como a Zebá y Salmaná.

13. Ellos habían dicho: "Adueñémonos de los campos de Dios".

14. Oh Dios mío, hazlos polvo en remolino, como la paja al viento;

15. como el fuego que devora la selva, como la llama que abrasa las montañas,

16. persíguelos así con tu tormenta, llénalos de terror con tu huracán.

17. Cubre sus rostros de vergüenza para que busquen, oh Señor, tu rostro;

18. queden avergonzados y aterrados para siempre y perezcan con un final ignominioso,

19. para que sepan que tú eres el Señor, tú solo, el altísimo sobre toda la tierra.





“O Senhor sempre orienta e chama; mas não se quer segui-lo e responder-lhe, pois só se vê os próprios interesses. Às vezes, pelo fato de se ouvir sempre a Sua voz, ninguém mais se apercebe dela; mas o Senhor ilumina e chama. São os homens que se colocam na posição de não conseguir mais escutar.” São Padre Pio de Pietrelcina