Salmos, 13
4. ¡Mírame, respóndeme, Señor, Dios mío! Ilumina mis ojos, para que no caiga en el sueño de la muerte,
4. ¡Mírame, respóndeme, Señor, Dios mío! Ilumina mis ojos, para que no caiga en el sueño de la muerte,
“Seja grato e beije docemente a mão de Deus. É sempre a mão de um pai que pune porque lhe quer bem” São Padre Pio de Pietrelcina