Eclesiástico, 41
1. ¡Muerte, qué amargo es tu recuerdopara el que vive tranquilo en medio de sus bienes, para el hombre despreocupado, a quien todo le va bien y aún tiene vigor para disfrutar de la vida!
1. ¡Muerte, qué amargo es tu recuerdopara el que vive tranquilo en medio de sus bienes, para el hombre despreocupado, a quien todo le va bien y aún tiene vigor para disfrutar de la vida!
“Para mim, Deus está sempre fixo na minha mente e estampado no meu coração.” São Padre Pio de Pietrelcina