Salmos, 30
12. Has trocado mi lamento en una danza, me has quitado el sayal y me has ceñido de alegría;
12. Has trocado mi lamento en una danza, me has quitado el sayal y me has ceñido de alegría;
O maldito “eu” o mantém apegado à Terra e o impede de voar para Jesus. São Padre Pio de Pietrelcina