0. ¡Aleluya! Alabad al Señor, todos los pueblos, aclamadlo, todas las naciones,

0. ¡Aleluya!

1. pues su amor por nosotros es muy grande y su lealtad dura por siempre.

1. ¡Alabad a Yahveh, todas las naciones, celebradle, pueblos todos!

2.

2. Porque es fuerte su amor hacia nosotros, la verdad de Yahveh dura por siempre.





“Para consolar uma alma na sua dor, mostre todo o bem que ela ainda pode fazer”. São Padre Pio de Pietrelcina