6. Todos los pueblos del mundo se convertirán y temerán sinceramente a Dios. Enterrarán a sus ídolos, causa de sus extravíos y sus errores, y alabarán, como es justo, al Señor de los siglos.





“Ele e ouvir a Sua voz por meio das Suas inspirações e iluminações interiores.” São Padre Pio de Pietrelcina