Eclesiástico, 22
24. Antes que las llamas se ve el humo del horno, así a la sangre derramada preceden las injurias.
24. Antes que las llamas se ve el humo del horno, así a la sangre derramada preceden las injurias.
“A divina bondade não só não rejeita as almas arrependidas, como também vai em busca das almas teimosas”. São Padre Pio de Pietrelcina