Talált 484 Eredmények: habían

  • Fueron devueltas a Israel las ciudades que le habían sido quitadas por los filisteos, desde Ecrón hasta Gat, e Israel libró su territorio de la mano de los filisteos. Además hubo paz entre Israel y los amorreos. (I Samuel 7, 14)

  • Ellos subieron. Apenas habían entrado en la ciudad, cuando se encontró con ellos Samuel, que salía para subir al alto. (I Samuel 9, 14)

  • Saúl respondió: "Nos dijo que las asnas habían sido encontradas". Pero no le contó lo que le había dicho sobre el asunto del reino. (I Samuel 10, 16)

  • Luego dijo a los mensajeros que habían venido: "Anunciad a las gentes de Yabés Galaad que mañana al mediodía les llegará el socorro". Llegaron los mensajeros y se lo anunciaron a las gentes de Yabés, que se llenaron de alegría. (I Samuel 11, 9)

  • Samuel le dijo: "¿Qué has hecho?". Saúl respondió: "Al ver que el pueblo se dispersaba lejos de mí y tú no llegabas en el día prefijado y que los filisteos se habían reunido en Micmás, (I Samuel 13, 11)

  • En todo el territorio de Israel no había ni un herrero, porque los filisteos se habían dicho: "¡Que los hebreos no puedan fabricarse espadas ni lanzas!". (I Samuel 13, 19)

  • Ellos se dejaron ver de la guarnición de los filisteos, y éstos se dijeron: "Los hebreos salen de las cuevas donde se habían escondido". (I Samuel 14, 11)

  • Los hebreos que estaban antes con los filisteos y habían subido con ellos al campamento se volvieron también para ponerse al lado de los israelitas que estaban con Saúl y Jonatán. (I Samuel 14, 21)

  • Y todos los israelitas que se habían escondido en la montaña de Efraín, al oír que los filisteos habían huido, se pusieron también a perseguirlos. (I Samuel 14, 22)

  • El pueblo entró en el bosque y vio la miel que corría por el suelo, pero nadie llevó la mano a su boca, porque temían el juramento que habían hecho. (I Samuel 14, 26)

  • Los tres hijos mayores de Jesé habían marchado a la guerra con Saúl; el mayor se llamaba Eliab, el segundo Abinadab y el tercero Sammá. (I Samuel 17, 13)

  • David era el más pequeño. Los tres mayores habían seguido a Saúl. (I Samuel 17, 14)


“As almas! As almas! Se alguém soubesse o preço que custam”. São Padre Pio de Pietrelcina