Talált 178 Eredmények: saber

  • Cuando llegó, Helí estaba sentado en su silla, a orilla del camino, tratando de divisar algo, pues estaba muy preocupado por lo que le pudiera haber pasado al Arca de Dios. Al saber en la ciudad la noticia que había traído este hombre, todo el mundo se puso a gritar. (1 Samuel 4, 13)

  • Todos los israelitas que se habían escondido en la montaña de Efraím, al saber que los filisteos huían, los persiguieron. (1 Samuel 14, 22)

  • Le hicieron saber a Saúl lo que había respondido David, (1 Samuel 18, 24)

  • Se le hizo saber a Saúl, quien mandó otros mensajeros, pero también ellos se pusieron a profetizar. Por tercera vez envió otro grupo y le pasó lo mismo. (1 Samuel 19, 21)

  • Jonatán contestó: «No lo pienses. ¿Crees tú que si llegara a saber que mi padre está en contra tuya no te lo diría en seguida?» (1 Samuel 20, 9)

  • Jonatán dijo a David: «Te prometo por Yavé, Dios de Israel, que mañana, a la misma hora, trataré de saber lo que piensa mi padre. Si es algo bueno para ti y no te envío a alguien con la noticia, que Yavé me trate no sólo así, sino peor aún. (1 Samuel 20, 12)

  • Al saber David que Nabal había muerto, exclamó: «¡Bendito sea Yavé, que me ha hecho justicia por la injuria que yo recibí de Nabal! Me ha impedido hacer el mal y ha hecho recaer la maldad de Nabal sobre su cabeza.»David envió mensajeros para proponer matrimonio a Abigaíl. (1 Samuel 25, 39)

  • envió espías para saber dónde se encontraba. Luego se puso en camino y llegó hasta el lugar donde acampaba Saúl. (1 Samuel 26, 4)

  • ¿Acaso no lo conoces? Seguro que vino a engañarte, a conocer tus planes y saber todo lo que haces.» (2 Samuel 3, 25)

  • Al saber Tou, rey de Jamat, que David ha bía derrotado a todo el ejército de Hadadezer, (2 Samuel 8, 9)

  • Había salido de Jerusalén con doscientos hombres invitados por él, que lo acompañaban sin saber lo que tramaba. (2 Samuel 15, 11)

  • Sin embargo, Absalón dijo: «Llamen también a Jusay, el arquita, para saber lo que piensa.» (2 Samuel 17, 5)


“É loucura fixar o olhar no que rapidamente passa”. São Padre Pio de Pietrelcina