Talált 111 Eredmények: meseta de Judea
Los habitantes de Jerusalén y Judea, sus Ancianos y Judas saludan y desean prosperidad a Aristóbulo, profesor del rey Tolomeo, de la raza de los sacerdotes ungidos, y a los judíos que están en Egipto. (2 Macabeos 1, 10)
Cuando esos sucesos llegaron a noticia del rey, pensó que toda Judea se había sublevado. Se puso furioso y, saliendo de Egipto, vino a tomar Jerusalén por las armas. (2 Macabeos 5, 11)
Timoteo, que había sido vencido antes por los judíos, reunió numerosas fuerzas extranjeras y un gran número de caballos traídos de Asia y se presentó con la intención de conquistar Judea por las armas. (2 Macabeos 10, 24)
entró en Judea, se acercó a Betsur, ciudad fuerte a unos kilómetros de Jerusalén, y la sitió. (2 Macabeos 11, 5)
En el año ciento cuarenta y nueve, los hombres de Judas se enteraron de que Antíoco Eupátor venía contra Judea con innumerables tropas, (2 Macabeos 13, 1)
Después de reunirse en privado con los Ancianos, acordó partir con los suyos a buscar una decisión por las armas, Dios mediante, antes de que el ejército del rey invadiera Judea y se hiciera dueño de Jerusalén. (2 Macabeos 13, 13)
Designó inmediatamente a Nicanor, que dirigía el escuadrón de elefantes, lo nombró general para Judea (2 Macabeos 14, 12)
Los paganos que habían huido de Judea por temor a Judas, acudieron muy numerosos a Nicanor, pensando que las desgracias y la derrota de los judíos serían victoria para ellos. (2 Macabeos 14, 14)
El destructor va a invadir a todas las ciudades, sin que se libre una sola. El valle será arrasado, la Meseta saqueada: lo asegura Yavé. (Jeremías 48, 8)
Se ha dictado la sentencia condenando a la región de la Meseta, a Jolón, Jasa y Mefat, (Jeremías 48, 21)
Vivía en ese tiempo en Judea el profeta Habacuq; éste acababa de preparar un guiso y de picar pan en un plato, y se dirigía al campo para llevárselo a los segadores. (Daniel 14, 33)
Pero al enterarse de que Arquelao gobernaba en Judea en lugar de su padre Herodes, tuvo miedo de ir allá. Conforme a un aviso que recibió en sueños, se dirigió a la provincia de Galilea (Evangelio según San Mateo 2, 22)