1. “Ouve, Israel: Hoje passarás o Jordão para despojar nações maiores e mais fortes do que tu, cidades importantes cujas muralhas sobem até o céu,

1. ¡Escucha, Israel! Estás a punto de cruzar el Jordán para ir a la conquista de naciones más numerosas y más fuertes que tú; de grandes ciudades, cuyas murallas se levantan hasta el cielo.

2. um povo forte e de alta estatura, descendente dos enacim, que conheces e dos quais ouviste dizer: ‘Quem poderá enfrentar os filhos de Enac?’.

2. Se trata de un pueblo numeroso, de estatura gigantesca, descendiente de los anaquitas, que tú ya conoces y de los cuales has oído decir: ¿Quién podrá mantenerse firme ante los hijos de Anac?

3. Sabe, pois, hoje, que o Senhor, teu Deus, marcha diante de ti como um fogo devorador. É ele quem os destruirá e os esmagará diante de ti, de tal forma que tu os despojarás e os aniquilarás prontamente, como o Senhor te prometeu.

3. Reconoce desde ahora mismo que es el Señor, tu Dios, quien va delante de ti como fuego devorador, que los destruirá. Él los derrotará delante de ti, y tú los desalojarás y los aniquilarás rápidamente, según la promesa del Señor.

4. Depois que o Senhor, teu Deus, os tiver expulsado de diante de ti, não digas no teu coração: ‘Por causa de minha justiça é que o Senhor me introduziu na posse dessa terra’. Porque é por causa da perversidade dessas nações que o Senhor as despoja diante de ti.

4. Cuando el Señor, tu Dios, los haya echado lejos de ti, no digas en tu corazón: Por mi justicia me ha dado el Señor la posesión de esta tierra, siendo así que es por su injusticia por lo que el Señor echa a esas naciones lejos de ti.

5. Não é pela tua justiça nem pela retidão do teu coração que entrarás na posse de suas terras, mas é por causa da perversidade dessas nações que o Senhor as despoja diante de ti. E é também porque o Senhor, teu Deus, quer cumprir a palavra que deu com juramento a teus pais, Abraão, Isaac e Jacó.

5. No por tu justicia ni por la rectitud de tu corazón vas a entrar en posesión de la tierra, sino por la injusticia de esas naciones las echa el Señor lejos de ti; y también para cumplir el juramento hecho a vuestros padres Abrahán, Isaac y Jacob.

6. Sabe, pois, que não é pela tua justiça que o Senhor, teu Deus, te dá a posse dessa terra excelente, porque és um povo de cabeça dura.

6. Reconoce que el Señor, tu Dios, no te da la posesión de esa buena tierra debido a tu justicia, pues no eres más que un pueblo de cabeza dura.

7. Lembra-te, não te esqueças de que modo irritaste o Senhor, teu Deus, no deserto. Desde o dia em que saíste do Egito até que chegaste a este lugar, não cessaste de ser rebelde ao Senhor.

7. Acuérdate no lo olvides: tú irritaste al Señor, tu Dios, en el desierto; desde el día en que saliste de Egipto hasta el día de vuestra entrada en este lugar habéis sido rebeldes al Señor.

8. Em Horeb, o provocaste de tal forma que ele, irado, quis aniquilar-te.

8. Ya en el Horeb provocasteis la ira del Señor, que montó en cólera contra vosotros hasta querer destruiros.

9. Quando eu subi ao monte para receber as tábuas de pedra, as tábuas da alian­ça que o Senhor fez convosco, permaneci no monte quarenta dias e quarenta noites, sem comer pão nem beber água.

9. Cuando subí yo a la montaña para recibir las tablas de piedra, las tablas de la alianza que el Señor hacía con vosotros, permanecí sobre la cima cuarenta días y cuarenta noches sin comer ni beber.

10. E o Senhor entregou-me as duas tábuas de pedra escritas com o dedo de Deus, nas quais estavam gravadas todas as palavras que o Senhor vos tinha dirigido no monte, no meio do fogo, no dia da assembleia.

10. Y el Señor me dio las dos tablas de piedra, escritas por el dedo de Dios, las cuales respondían exactamente a los mandamientos que el Señor os había anunciado en la montaña, en medio del fuego, el día de la asamblea.

11. Passados quarenta dias e quarenta noites, o Senhor entregou-me as duas tábuas de pedra, as tábuas da aliança.

11. Al cabo de cuarenta días y cuarenta noches, el Señor me dio las dos tablas de piedra, las tablas de la alianza,

12. O Senhor disse-me: ‘Vamos, desce prontamente daqui, porque o teu povo que tiraste do Egito corrompeu-se. Depressa se desviaram do caminho que lhes mandei seguir: fabricaram para si um ídolo fundido’.

12. y me dijo: Levántate y baja rápido de aquí, porque tu pueblo, el que has sacado de Egipto, ha prevaricado: pronto se ha desviado del camino que yo le ordené y se han hecho una imagen de metal fundido.

13. ‘Vejo – continuou o Senhor, que essa nação é um povo de cabeça dura.

13. Y continuó: Ya he visto a este pueblo: es un pueblo de cabeza dura;

14. Deixa que eu o aniquile e apague o seu nome de debaixo do céu. Farei de ti uma nação mais forte e mais numerosa do que esta’.

14. déjame que lo destruya y borre su nombre de la tierra, y te daré una nación más fuerte y más numerosa que ese pueblo.

15. Tendo eu descido do monte, o qual ardia em fogo, trazendo na mão as duas tábuas da aliança,

15. Yo bajé de la montaña, que estaba en llamas, trayendo en mis manos las dos tablas de la alianza.

16. verifiquei que vós tínheis de fato pecado contra o Senhor, vosso Deus, fabricando-vos um bezerro de metal fundido, e desviando-vos assim tão depressa do caminho que vos tinha traçado o Senhor.

16. Cuando vi que habíais pecado contra el Señor, vuestro Dios, y que os habíais hecho un becerro de metal fundido, apartándoos bien pronto del camino que os había señalado el Señor,

17. Arrojei então de minhas mãos as duas tábuas e quebrei-as à vossa vista.

17. tiré las tablas que traía en las manos y las hice pedazos ante vuestros ojos.

18. Prostrei-me em seguida diante do Senhor, como antes, e estive quarenta dias e quarenta noites sem comer pão, nem beber água, por causa de todos os pecados que tínheis cometido, fazendo o que é mau aos olhos do Senhor, e provocando-o à ira.

18. Me postré luego en presencia del Señor. Como la primera vez, estuve durante cuarenta días sin comer ni beber por causa del pecado que vosotros habíais cometido haciendo lo que es malo a los ojos del Señor hasta el punto de irritarle;

19. Eu estava aterrado vendo o furor do Senhor contra ti, a ponto de te querer destruir. Entretanto, ainda desta vez ele me ouviu.

19. pues yo tenía miedo de la ira y el furor con que estaba irritado el Señor contra vosotros hasta el extremo de querer destruiros. Esta vez todavía me escuchó el Señor.

20. Também contra Aarão o Senhor estava de tal forma irado que queria matá-lo, mas eu intercedi também por Aarão.

20. También contra Aarón se irritó fuertemente el Señor y quería destruirlo. Yo intercedí también en favor de Aarón.

21. Quanto ao objeto de vosso pecado, o bezerro que tínheis feito, tomei-o, atirei-o ao fogo e o fiz em pedaços, esmagando-o até que fosse reduzido a pó; e joguei esse pó na torrente que desce da montanha.

21. Tomé entonces el becerro que os habíais hecho, que era causa de vuestro pecado, lo eché al fuego y, moliéndolo bien hasta reducirlo a polvo, lo tiré al agua del torrente que bajaba de la montaña.

22. Provocastes também o Senhor em Tabera, em Massa e em Quibrot-Hataava.

22. En Taberá, en Masá y en Quibrot Hataavá provocasteis también la ira del Señor.

23. Quando o Senhor quis que partísseis de Cades Barne, dizendo: ‘Subi e tomai posse da terra que vos dei’, vós vos rebelastes contra a ordem do Senhor, desconfiando dele e não ouvistes a sua voz.

23. Y cuando el Señor os mandó salir de Cades Barne diciéndoos que subierais a tomar posesión de la tierra que os daba, fuisteis rebeldes a la voz del Señor, vuestro Dios, no le creísteis ni escuchasteis su palabra.

24. Desde que vos conheço, fostes sempre rebeldes ao Senhor.

24. Habéis sido rebeldes al Señor desde el día mismo en que os conoció.

25. Fiquei, portanto, quarenta dias e quarenta noites prostrado diante do Senhor, porque vos queria aniquilar.

25. Yo me postré ante el Señor y así permanecí los cuarenta días y las cuarenta noches, pues el Señor pensaba destruiros.

26. Orando, eu disse-lhe: Senhor Javé, não des­truais vosso povo, vossa herança, que res­gatastes com a vossa grandeza e tirastes do Egito com mão forte.

26. Intercedí ante el Señor y le dije: Señor, Señor, no destruyas a tu pueblo, a tu heredad, que tú has rescatado en tu grandeza y que has sacado de Egipto con tu mano poderosa.

27. Lembrai-vos de vossos servos Abraão, Isaac e Jacó. Não olheis para a dureza desse povo, para sua maldade e seu pecado,

27. Acuérdate de tus siervos Abrahán, Isaac y Jacob. No te fijes en la terquedad de este pueblo, en su crimen y en su pecado,

28. para que os ha­bitantes da terra de onde nos tirastes não digam: O Senhor não podia introduzi-los na terra que lhes tinha prometido, ou então: ele os odiava, e por isso tirou-os, a fim de matá-los no deserto.

28. no sea que digan en la tierra de la que nos has sacado: El Señor no ha sido capaz de llevarlos hasta la tierra que les había prometido. Los ha hecho salir de aquí por odio, para hacerles morir en el desierto.

29. E não obstante, eles são o vosso povo, a vossa herança, que tirastes do Egito com a vossa grande força e com o vosso braço estendido.”

29. Pero son tu pueblo, tu heredad, que rescataste con tu mano fuerte y tu brazo poderoso.

Bíblia Ave Maria - Minden jog fenntartva.





“Os corações fortes e generosos não se lamentam, a não ser por grandes motivos e,ainda assim,não permitem que tais motivos penetrem fundo no seu íntimo.(P.e Pio) São Padre Pio de Pietrelcina