0. ¡Aleluya!

1. ¡Dad gracias a Yahveh, porque es bueno, porque es eterno su amor!

2. ¡Diga la casa de Israel: que es eterno su amor!

3. ¡Diga la casa de Aarón: que es eterno su amor!

4. ¡Digan los que temen a Yahveh: que es eterno su amor!

5. En mi angustia hacia Yahveh grité, él me respondió y me dio respiro;

6. Yahveh está por mí, no tengo miedo, ¿qué puede hacerme el hombre?

7. Yahveh está por mí, entre los que me ayudan, y yo desafío a los que me odian.

8. Mejor es refugiarse en Yahveh que confiar en hombre;

9. mejor es refugiarse en Yahveh que confiar en magnates.

10. Me rodeaban todos los gentiles: en el nombre de Yahveh los cercené;

11. me rodeaban, me asediaban: en el nombre de Yahveh los cercené.

12. Me rodeaban como avispas, llameaban como fuego de zarzas: en el nombre de Yahveh los cercené.

13. Se me empujó, se me empujó para abatirme, pero Yahveh vino en mi ayuda;

14. mi fuerza y mi cántico es Yahveh, él ha sido para mí la salvación.

15. Clamor de júbilo y salvación, en las tiendas de los justos: «¡La diestra de Yahveh hace proezas,

16. excelsa la diestra de Yahveh, la diestra de Yahveh hace proezas!»

17. No, no he de morir, que viviré, y contaré las obras de Yahveh;

18. me castigó, me castigó Yahveh, pero a la muerte no me entregó.

19. ¡Abridme las puertas de justicia, entraré por ellas, daré gracias a Yahveh!

20. Aquí está la puerta de Yahveh, por ella entran los justos.

21. Gracias te doy, porque me has respondido, y has sido para mí la salvación.

22. La piedra que los constructores desecharon en piedra angular se ha convertido;

23. esta ha sido la obra de Yahveh, una maravilla a nuestros ojos.

24. ¡Este es el día que Yahveh ha hecho, exultemos y gocémonos en él!

25. ¡Ah, Yahveh, da la salvación! ¡Ah, Yahveh, da el éxito!

26. ¡Bendito el que viene en el nombre de Yahveh! Desde la Casa de Yahveh os bendecimos.

27. Yahveh es Dios, él nos ilumina. ¡Cerrad la procesión, ramos en mano, hasta los cuernos del altar!

28. Tú eres mi Dios, yo te doy gracias, Dios mío, yo te exalto.

29. ¡Dad gracias a Yahveh, porque es bueno, porque es eterno su amor!





“Mesmo quando perdemos a consciência deste mundo, quando parecemos já mortos, Deus nos dá ainda uma chance de entender o que é realmente o pecado, antes de nos julgar. E se entendemos corretamente, como podemos não nos arrepender?” São Padre Pio de Pietrelcina