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  • Y creyó él en Yahveh, el cual se lo reputó por justicia. (Génesis 15, 6)

  • Porque yo le conozco y sé que mandará a sus hijos y a su descendencia que guarden el camino de Yahveh, practicando la justicia y el derecho, de modo que pueda concerderle Yahveh a Abraham lo que le tiene apalabrado.» (Génesis 18, 19)

  • Y dijo Raquel: «Dios me ha hecho justicia, pues ha oído mi voz y me ha dado un hijo.» Por eso le llamó Dan. (Génesis 30, 6)

  • Yo pasaré esta noche por la tierra de Egipto y heriré a todos los primogénitos del país de Egipto, desde los hombres hasta los ganados, y me tomaré justicia de todos los dioses de Egipto. Yo, Yahveh. (Exodo 12, 12)

  • No sigas a la mayoría para hacer el mal; ni te inclines en un proceso por la mayoría en contra de la justicia. (Exodo 23, 2)

  • Siendo juez no hagas injusticia, ni por favor del pobre, ni por respeto al grande: con justicia juzgarás a tu prójimo. (Levítico 19, 15)

  • Los egipcios estaban enterrando a los suyos que habían sido heridos por Yahveh, a todos los primogénitos; Yahveh había hecho justicia de sus dioses. (Números 33, 4)

  • Y di entonces esta orden a vuestros jueces: «Escucharéis lo que haya entre vuestros hermanos y administraréis justicia entre un hombre y su hermano o un forastero. (Deuteronomio 1, 16)

  • Tal será nuestra justicia: cuidar de poner en práctica todos estos mandamientos ante Yahveh nuestro Dios, como él nos ha prescrito.» (Deuteronomio 6, 25)

  • Has de saber, pues, que no es por tu justicia por lo que Yahveh tu Dios te da en posesión esa tierra buena, ya que eres un pueblo de dura cerviz. (Deuteronomio 9, 6)

  • que hace justicia al huérfano y a la viuda, y ama al forastero, a quien da pan y vestido. (Deuteronomio 10, 18)

  • Justicia, sólo justicia has de buscar, para que vivas y poseas la tierra que Yahveh tu Dios te da. (Deuteronomio 16, 20)


O sábio elogia a mulher forte dizendo: os seu dedos manejaram o fuso. A roca é o alvo dos seus desejos. Fie, portanto, cada dia um pouco. Puxe fio a fio até a execução e, infalivelmente, você chegará ao fim. Mas não tenha pressa, pois senão você poderá misturar o fio com os nós e embaraçar tudo.” São Padre Pio de Pietrelcina