Fundar 78 Resultados para: cedros del Líbano

  • Mándame también madera de cedro, ciprés y sándalo del Líbano, pues conozco bien la habilidad de tus súbditos en derribar los árboles del Líbano. Mis súbditos trabajarán con los tuyos. (II Crónicas 2, 7)

  • y te cortaremos toda la madera que necesites del Líbano, haciéndotela llegar en balsas hasta Jafa, donde la recogerás tú para llevarla a Jerusalén". (II Crónicas 2, 15)

  • Balat, todas las ciudades almacenes que le pertenecían para los carros y la caballería; hizo todo lo que quiso en Jerusalén, en el Líbano y en todo el territorio de su jurisdicción. (II Crónicas 8, 6)

  • y 300 escudos de oro batido más pequeños, a tres kilos y medio de oro cada uno; y los pusieron en la sala "Bosque del Líbano". (II Crónicas 9, 16)

  • Todos los vasos de beber del rey Salomón eran de oro, y toda la vajilla de la sala del "Bosque del Líbano" era de oro fino. No había nada de plata, pues la plata no se estimaba en tiempos del rey Salomón. (II Crónicas 9, 20)

  • Logró que la plata abundara en Jerusalén como las piedras, y los cedros como los sicómoros en la Sefela. (II Crónicas 9, 27)

  • Joás, rey de Israel, mandó a decir a Amasías, rey de Judá: "El cardo del Líbano manda a decir al cedro del Líbano: Da tu hija por esposa a mi hijo; pero pasaron las fieras del Líbano y pisotearon el cardo. (II Crónicas 25, 18)

  • Dieron dinero a los canteros y a los carpinteros; mandaron víveres, bebidas y aceite a los sidonios y a los tirios para que enviasen por mar madera de cedro desde el Líbano a Jafa, conforme a la autorización que les había dado Ciro, rey de Persia. (Esdras 3, 7)

  • Nabucodonosor, rey de Asiria, envió emisarios a todos los habitantes de Persia y a todos los de las regiones occidentales, a los de Cilicia, Damasco, Líbano y Antilíbano, a todos los del litoral, (Judit 1, 7)

  • la voz del Señor que desgaja los cedros, el Señor desgaja los cedros del Líbano; (Salmos 29, 5)

  • hace brincar como un novillo al Líbano, al Sarión como una cría de búfalo; (Salmos 29, 6)

  • Habrá abundancia de trigo en el país, hasta en la cima de los montes ondearán las espigas como en el Líbano, florecerán como la hierba de los campos. (Salmos 72, 16)


“As almas não são oferecidas como dom; compram-se. Vós ignorais quanto custaram a Jesus. É sempre com a mesma moeda que é preciso pagá-las”. São Padre Pio de Pietrelcina