Fundar 760 Resultados para: Vida

  • Ahora yo se lo doy al Señor; estará dedicado al Señor todos los días de su vida". Después adoraron al Señor. (I Samuel 1, 28)

  • El Señor da la muerte y da la vida, hace bajar al abismo y hace subir de él. (I Samuel 2, 6)

  • Los filisteos fueron derrotados. No volvieron a invadir el territorio de Israel, y la mano del Señor pesó sobre los filisteos durante toda la vida de Samuel. (I Samuel 7, 13)

  • Samuel fue juez de Israel durante toda su vida. (I Samuel 7, 15)

  • Durante toda la vida de Saúl hubo una guerra encarnizada contra los filisteos. Saúl se hacía con todos los hombres fuertes y valientes que veía. (I Samuel 14, 52)

  • Pero Saúl y su ejército perdonaron la vida a Agag y a lo mejor de las ovejas y de las vacas, a las más gordas y a los corderos; es decir, respetaron todo lo de valor, pero destruyeron lo que no valía nada. (I Samuel 15, 9)

  • Cuando Saúl vio a David salir al encuentro del filisteo, preguntó a Abner, jefe del ejército: "¿De quién es hijo este joven, Abner?". Abner respondió: "Por tu vida, oh rey, que no lo sé". (I Samuel 17, 55)

  • tuvo más miedo a David y fue su enemigo durante toda su vida. (I Samuel 18, 29)

  • Él expuso su propia vida, mató al filisteo y el Señor dio una gran victoria a todo Israel. Lo viste tú mismo y te alegraste. ¿Por qué quieres hacerte reo de sangre inocente, matando a David sin razón?". (I Samuel 19, 5)

  • David huyó de Nayot de Ramá, fue a ver a Jonatán y le dijo: "¿Qué he hecho yo? ¿Cuál es mi falta? ¿Qué crimen he cometido contra tu padre para que atente contra mi vida?". (I Samuel 20, 1)

  • David replicó: "Tu padre sabe muy bien que yo soy tu amigo y se dice: Que no lo sepa Jonatán para que no se entristezca. Pero, por la vida del Señor y por tu vida, que estoy a un paso de la muerte". (I Samuel 20, 3)

  • David dijo a Abiatar: "Ya pensé yo, al estar allí aquel día Doeg, que seguramente se lo comunicaría a Saúl. Yo soy el responsable de la vida de toda tu familia. (I Samuel 22, 22)


“O mal não se vence com o mal, mas com o bem, que tem em si uma força sobrenatural.” São Padre Pio de Pietrelcina