Fundar 185 Resultados para: vergüenza eterna

  • Tengan vergüenza de la fornicación ante su padre y su madre, y de la mentira, ante un jefe y un poderoso; (Eclesiástico 41, 17)

  • Entonces sentirás una auténtica vergüenza, y serás bien visto por todos lo hombres. (Eclesiástico 41, 27)

  • Si tu hija es atrevida, vigílala bien, no sea que te convierta en la burla de tus enemigos, en la habladuría de la ciudad y el comentario de la gente, y te cubra de vergüenza a los ojos de todos. (Eclesiástico 42, 11)

  • Moisés le confirió la investidura y lo ungió con el óleo santo. Esta fue una alianza eterna para él y para sus descendientes, mientras dure el cielo, para que sirvan a Dios como sacerdotes y bendigan al pueblo en su nombre. (Eclesiástico 45, 15)

  • y a Josué, hijo de Josedec? En sus días, ellos reconstruyeron la Casa y levantaron el Templo consagrado al Señor, destinado a una gloria eterna. (Eclesiástico 49, 12)

  • así el rey de Asiria llevará desnudos y descalzos, y con las nalgas al aire, a los cautivos de Egipto y a los deportados de Cus, jóvenes y viejos, para vergüenza de Egipto. (Isaías 20, 4)

  • La gente sentirá terror y vergüenza a causa de Cus, su esperanza, y a causa de Egipto, su orgullo. (Isaías 20, 5)

  • La tierra está profanada bajo los pies de los que la habitan, porque ellos violaron las leyes, transgredieron los preceptos, rompieron la alianza eterna. (Isaías 24, 5)

  • Confíen en el Señor para siempre, porque el Señor es una Roca eterna. (Isaías 26, 4)

  • El amparo del Faraón será su vergüenza y la protección a la sombra de Egipto, su confusión. (Isaías 30, 3)

  • todos ellos serán defraudados por un pueblo que no sirve de nada, que no les aporta ayuda ni provecho, sino vergüenza y oprobio. (Isaías 30, 5)

  • Están aterrados en Sión los pecadores, un temblor invade a los impíos: "¿Quién de nosotros habitará en un fuego devorador? ¿Quién de nosotros habitará en una hoguera eterna?". (Isaías 33, 14)


“Seja grato e beije docemente a mão de Deus. É sempre a mão de um pai que pune porque lhe quer bem” São Padre Pio de Pietrelcina