Fundar 230 Resultados para: momento

  • En el momento en que se tienen pesadillas, cuando una pesadez se apodera de los hombres, (Job 4, 13)

  • ¿Acaso se complacerá el malo en el Omnipotente, o lo invoca en todo momento? (Job 27, 10)

  • Si hay junto a él en ese momento un ángel de Dios, un intercesor que le indique su deber, (Job 33, 23)

  • no sea que se enoje y perezcan, pues su cólera estalla en un momento. ¡Felices los que en él se refugian! (Salmos 2, 12)

  • Sólo un momento y ya no está el impío, si buscas dónde estaba ya no lo encontrarás. (Salmos 37, 10)

  • ¿Cómo? ¿están en la ruina en un momento? Ya no están, trágico fue su fin. (Salmos 73, 19)

  • Busqué al Señor, en el momento de la prueba, de noche sin descanso, hacia él tendí mi mano y mi alma se negó a ser consolada. (Salmos 77, 3)

  • Mil años para ti son como un día, un ayer, un momento de la noche. (Salmos 90, 4)

  • Por el momento harías bien mandándome tropas, porque todos mis soldados me han abandonado.» (1 Macabeos 11, 43)

  • El año ciento sesenta y nueve, siendo rey Demetrio, nosotros los judíos les escribimos en el peor momento de las pruebas que estábamos soportando en esos años. Y les decíamos: «Jasón y sus partidarios han traicionado la causa de la Tierra Santa y del Reino, (2 Macabeos 1, 7)

  • En el momento de entregar el último suspiro dijo: «Asesino, nos quitas la presente vida, pero el Rey del mundo nos resucitará. Nos dará una vida eterna a nosotros que morimos por sus leyes.» (2 Macabeos 7, 9)

  • También me doy cuenta que los reyes y príncipes vecinos están espiando la ocasión y esperando el momento oportuno. Por eso, he designado rey a mi hijo Antíoco, a quien ya les había presentado y recomendado a la mayoría de ustedes, cuando tenía que ir a las regiones del norte. A él le he escrito la carta que les comunico. (2 Macabeos 9, 25)


“Reze pelos infiéis, pelos fervorosos, pelo Papa e por todas as necessidades espirituais e temporais da Santa Igreja, nossa terna mãe. E faça uma oração especial por todos os que trabalham para a salvação das almas e para a glória do nosso Pai celeste.” São Padre Pio de Pietrelcina