Fundar 230 Resultados para: momento

  • Quiera Yavé concederte prudencia y entendimiento en el momento que te establece sobre Israel, para que guardes la Ley de Yavé tu Dios. (1 Crónicas 22, 12)

  • en ese momento la Casa se llenó de la nube de la Gloria de Yavé y los sacerdotes no pudieron continuar en su servicio a causa de la nube, porque la Gloria de Yavé llenaba la Casa de Dios. (2 Crónicas 5, 14)

  • En el momento en que comenzaron las aclamaciones y las alabanzas, Yavé preparó una trampa en que cayeron los hijos de Amón, los de Moab y los del monte Seír que habían venido para atacar a Judá. (2 Crónicas 20, 22)

  • Luego regresé a la casa. Los consejeros no supieron dónde había ido ni lo que había hecho. Hasta este momento no les había dicho nada a los judíos, ni a los consejeros, ni a los sacerdotes, ni a los notables, ni a ninguno de los que tenían un cargo público. (Nehemías 2, 16)

  • Bendice en todo momento al Señor Dios y pídele que tus caminos sean rectos y tus proyectos favorables, porque no todas las naciones tienen la verdadera sabiduría. Es el Señor el que da todos los bienes y, si quiere, humilla hasta lo profundo del infierno. Recuerda, hijo, todos estos mandatos y no permitas que se borren de tu corazón. (Tobías 4, 19)

  • Si no quiere socorrernos en el plazo de cinco días, tiene poder para salvarnos en cualquier otro momento, como lo tiene para destruirnos en presencia de nuestros enemigos. (Judit 8, 15)

  • Entró Judit y se instaló. El corazón de Holofernes quedó cautivado y su espíritu perturbado. Era presa de un deseo intenso de poseerla, porque desde el día en que la vio atisbaba el momento favorable para seducirla. (Judit 12, 16)

  • Este es el momento para que salves a tu pueblo. Da éxito a mis planes para aplastar a los enemigos que se han levantado en contra nuestra.» (Judit 13, 5)

  • y después, acercándose al lecho, tomó al hombre por la cabellera y dijo: «Señor, Dios de Israel, dame fuerzas en este momento.» (Judit 13, 7)

  • Ahora cuéntame lo que has hecho estos días.» Judit, en medio del pueblo, narró todo lo que había hecho, desde que salió hasta ese momento. (Judit 14, 8)

  • «¿Qué te pasa, reina Ester?», le preguntó él, un momento después. «Dime, ¿qué deseas? Pues aunque sea la mitad de mi reino, te la daré.» Ella le dijo: (Ester 5, 3)

  • Este preguntó si se le había premiado a Mardoqueo por eso con alguna distinción o cargo. Los jóvenes que lo atendían le respondieron que no se había hecho nada. Precisamente en ese momento entraba Amán al patio del palacio para pedirle al rey que mandara colgar a Mardoqueo de la horca que él había ordenado levantar. (Ester 6, 3)


“O mal não se vence com o mal, mas com o bem, que tem em si uma força sobrenatural.” São Padre Pio de Pietrelcina