Fundar 99 Resultados para: fuerzas

  • Al saber estas noticias, el rey Antíoco se enojó sobremanera y mandó reunir todas las fuerzas del reino, pues tenía un ejército poderoso. (1 Macabeos 3, 27)

  • El número de sus fuerzas era de cien mil infantes, veinte mil jinetes y treinta y dos elefantes adiestrados para la guerra. (1 Macabeos 6, 30)

  • Cuando lo supo Lisias, se apresuró a dar la señal de partida, diciendo al rey, a los generales del ejército y a los soldados: «De día en día perdemos fuerzas, escasean los alimentos y el lugar que sitiamos está fuertemente defendido; no podemos descuidar los asuntos del reino. (1 Macabeos 6, 57)

  • Alcimo comprendió que Judas y los suyos lo superaban en fuerzas y que no podía oponerse a ellos, por lo que volvió donde el rey y los acusó de graves delitos. (1 Macabeos 7, 25)

  • dejando fuerzas en cada una de ellas para intimidar a los israelitas. (1 Macabeos 9, 51)

  • Si tienes confianza en tus tropas, baja a la llanura y allí mediremos nuestras fuerzas, pues yo tengo conmigo el ejército de las ciudades. (1 Macabeos 10, 71)

  • Fortificó las ciudades de Judea, así como Betsur, en los límites de Judea, donde se encontraban las fuerzas enemigas, y puso en ellas una guarnición judía. (1 Macabeos 14, 33)

  • Tolomeo se apresuró después a enviar cartas al rey para informarlo de lo sucedido y pedirle el envío de fuerzas y socorro con los cuales le entregaría las ciudades y el país. (1 Macabeos 16, 18)

  • El Macabeo, dejando a Simón, José Zaqueo y a los que con ellos estaban, con fuerzas suficientes para mantener el asedio, se marchó donde más falta hacía su presencia. (2 Macabeos 10, 19)

  • Timoteo, que había sido vencido antes por los judíos, reunió numerosas fuerzas extranjeras y un gran número de caballos traídos de Asia y se presentó con la intención de conquistar Judea por las armas. (2 Macabeos 10, 24)

  • Las fuerzas del Macabeo asediaron con gran valentía la fortaleza durante cuatro días. (2 Macabeos 10, 33)

  • reunió casi ochenta mil hombres y todas las fuerzas de caballería, y se puso en marcha contra los judíos, con la intención de hacer de la ciudad de Jerusalén una población de griegos, (2 Macabeos 11, 2)


“Devemos odiar os nossos pecados, visto que o amor ao Senhor significa paz”. São Padre Pio de Pietrelcina