20. Ornán, que estaba trillando el trigo, al darse vuelta, había visto al Ángel, y los cuatro hijos que estaban con él se habían escondido.





“As almas não são oferecidas como dom; compram-se. Vós ignorais quanto custaram a Jesus. É sempre com a mesma moeda que é preciso pagá-las”. São Padre Pio de Pietrelcina