Encontrados 1411 resultados para: Ner

  • Pues de la misma manera que los hijos participan de la misma carne y sangre, también él participó de modo parecido, para reducir a la impotencia mediante la muerte a aquel que tiene el imperio de la muerte, es decir, al diablo, (Hebreos 2, 14)

  • Por eso me irrité contra aquella generación, y dije: "Su corazón siempre anda extraviado; nunca conocen mis caminos. (Hebreos 3, 10)

  • Mientras sigue en vigor la promesa de entrar en su descanso, hay que tener mucho cuidado, no sea que alguno de vosotros no lo consiga. (Hebreos 4, 1)

  • Acerquémonos, pues, con confianza al trono de la gracia, a fin de obtener misericordia y hallar la gracia del auxilio oportuno. (Hebreos 4, 16)

  • Como dice también en otro lugar: Tú eres sacerdote para siempre, a la manera de Melquisedec. (Hebreos 5, 6)

  • pues fue proclamado por Dios sumo sacerdote a la manera de Melquisedec. (Hebreos 5, 10)

  • Pues debiendo ser ya maestros por razón del tiempo, todavía tenéis necesidad de que se os enseñen los primeros rudimentos de oráculos divinos, y habéis llegado a tener necesidad de leche, no de alimento sólido. (Hebreos 5, 12)

  • donde, como precursor nuestro, entró Jesús, convertido en sumo sacerdote para siempre a la manera de Melquisedec. (Hebreos 6, 20)

  • sin embargo, uno que no desciende de él por generación recibió la décima parte del botín conquistado por Abrahán y bendijo al portador de la promesa. (Hebreos 7, 6)

  • Por consiguiente, si la perfección hubiese sido realizada por el sacerdocio levítico -ya que por su medio el pueblo recibió la ley-, ¿qué necesidad habría entonces de que surgiese otro sacerdote a la manera de Melquisedec, y que no lo fuese según el orden de Aarón? (Hebreos 7, 11)

  • Porque de él se ha dado este testimonio: Tú eres sacerdote para siempre, a la manera de Melquisedec. (Hebreos 7, 17)

  • Era, pues, necesario que las figuras de las cosas celestes fuesen purificadas de esta manera, y las realidades mismas celestes lo fuesen también, pero con sacrificios superiores a los de aquí abajo. (Hebreos 9, 23)


“Seja paciente e espere com confiança o tempo do Senhor”. São Padre Pio de Pietrelcina