Encontrados 226 resultados para: nuestra

  • Él piensa que nuestra vida es un juego y la existencia, una feria para obtener ganancias: "Es necesario, dice, ganar por todos los medios, aunque sean malos". (Sabiduría 15, 12)

  • Elogiemos a los hombres ilustres, a los antepasados de nuestra raza. (Eclesiástico 44, 1)

  • Si ete mujeres agarrarán a un hombre, en aquel día, diciendo: "Comeremos nuestro propio pan y nos vestiremos con nuestra ropa, con tal de llevar tu nombre: ¡borra nuestra afrenta!". (Isaías 4, 1)

  • Y los habitantes de esta costa dirán en aquel día: ‘¡Ahí está nuestra esperanza, a la que acudíamos en busca de auxilio, para ser librados del rey de Asiria! Y ahora nosotros ¿cómo podremos escapar?’". (Isaías 20, 6)

  • Sí, en la senda trazada por tus juicios, esperamos en ti, Señor: tu Nombre y tu recuerdo son el deseo de nuestra alma. (Isaías 26, 8)

  • Señor, ten piedad de nosotros, nosotros esperamos en ti. Sé nuestro brazo cada mañana y nuestra salvación en el tiempo de la angustia. (Isaías 33, 2)

  • Porque tú me salvaste, Señor, haremos resonar nuestras liras todos los días de nuestra vida junto a la Casa del Señor". (Isaías 38, 20)

  • Nos hemos convertido en una cosa impura, toda nuestra justicia es como un trapo sucio. Nos hemos marchitado como el follaje y nuestras culpas nos arrastran como el viento. (Isaías 64, 5)

  • Nuestra Casa santa y gloriosa, donde te alababan nuestros padres, ha sido presa de las llamas, y todo lo que teníamos de precioso se ha convertido en una ruina. (Isaías 64, 10)

  • La Ignominia ha devorado las ganancias de nuestros padres desde nuestra juventud: sus ovejas y sus vacas, sus hijos y sus hijas. (Jeremías 3, 24)

  • Acostémonos en nuestra ignominia y que nos cubra nuestra vergüenza, porque hemos pecado contra el Señor, nuestro Dios, nosotros y nuestros padres, desde nuestra juventud hasta el día de hoy, y no hemos escuchado la voz del Señor, nuestro Dios. (Jeremías 3, 25)

  • ¡Si nuestra iniquidad atestigua contra nosotros, obra, Señor, a causa de tu Nombre! Porque son muchas nuestras apostasías, hemos pecado contra ti. (Jeremías 14, 7)


“O verdadeiro servo de Deus é aquele que usa a caridade para com seu próximo, que está decidido a fazer a vontade de Deus a todo custo, que vive em profunda humildade e simplicidade”. São Padre Pio de Pietrelcina