Eclesiastés, 4
12. Si alguien ataca al que está solo, dos le oponen resistencia; y la cuerda de tres hilos no se rompe fácilmente.
12. Si alguien ataca al que está solo, dos le oponen resistencia; y la cuerda de tres hilos no se rompe fácilmente.
“Quando Jesus vem a nós na santa comunhão, encontra alegria em Sua criatura. Por nossa parte, procuremos Nele a nossa alegria.” São Padre Pio de Pietrelcina