23. Y David respondió: "¿Qué os importa a vosotros, hijos de Sarvia, para que os convirtáis hoy en mis adversarios? ¿Es que va a morir hoy alguno en Israel? ¿Quizá no me doy cuenta de que hoy me constituyo en el rey de Israel?".





“A divina bondade não só não rejeita as almas arrependidas, como também vai em busca das almas teimosas”. São Padre Pio de Pietrelcina