3. Los jefes de los filisteos preguntaron: "¿Por qué vienen estos hebreos?". Aquís les respondió: "Éste es David, servidor de Saúl, rey de Israel, que ha estado conmigo unos dos años, y no he encontrado nada que reprocharle desde el día en que vino a mí hasta hoy".





“As almas! As almas! Se alguém soubesse o preço que custam”. São Padre Pio de Pietrelcina