I Crónicas, 17
27. bendice la casa de tu siervo para que subsista eternamente en tu presencia; porque aquel a quien tú bendices, será bendito para siempre".
27. bendice la casa de tu siervo para que subsista eternamente en tu presencia; porque aquel a quien tú bendices, será bendito para siempre".
“Tenhamos sempre horror ao pecado mortal e nunca deixemos de caminhar na estrada da santa eternidade.” São Padre Pio de Pietrelcina