Salmos, 141
1. Salmo de David Señor, te estoy llamando, ven corriendo, escucha mi voz cuando te llamo;
1. Salmo de David Señor, te estoy llamando, ven corriendo, escucha mi voz cuando te llamo;
“No tumulto das paixões terrenas e das adversidades, surge a grande esperança da misericórdia inexorável de Deus. Corramos confiantes ao tribunal da penitência onde Ele, com ansiedade paterna, espera-nos a todo instante.” São Padre Pio de Pietrelcina