Salmos, 75
6. no levantéis tan alto vuestra frente, no habléis con un cuello de insolencia!»
6. no levantéis tan alto vuestra frente, no habléis con un cuello de insolencia!»
“Que Jesus o aperte sempre mais ao Seu divino coração. Que Ele o alivie no sofrimento e lhe dê o abraço final no Paraíso.” São Padre Pio de Pietrelcina