7. y no sólo con su llegada, sino también con el consuelo que ustedes le prodigaron. Él nos habló del profundo afecto, del dolor y de la preocupación que ustedes sienten por mí, con lo cual me alegré más todavía.





“Que o Espírito Santo guie a sua inteligência, faça-o descobrir a verdade escondida na Sagrada Escritura e inflame a sua vontade para praticá-la.” São Padre Pio de Pietrelcina