Talált 165 Eredmények: Nación

  • ¡Miren! Un pueblo viene del Norte, una gran nación y reyes numerosos surgen desde el confín de la tierra. (Jeremías 50, 41)

  • Aún se consumían nuestros ojos, aguardando en vano una ayuda; en nuestros puestos de guardia, mirábamos hacia una nación que no puede salvar. (Lamentaciones 4, 17)

  • Porque él hizo venir contra ellos a una nación lejana, una nación insolente, de lengua desconocida, que no respetó al anciano ni tuvo compasión del niño; (Baruc 4, 15)

  • Así habla el Señor: Porque te han dicho: "Tú devoras a los hombres y privas de sus hijos a tu nación", (Ezequiel 36, 13)

  • por eso, ya no volverás a devorar a los hombres ni a privar de sus hijos a tu nación -oráculo del Señor-. (Ezequiel 36, 14)

  • Nunca más te haré escuchar el ultraje de las naciones; ya no soportarás el oprobio de los pueblos ni privarás de sus hijos a tu nación -oráculo del Señor-. (Ezequiel 36, 15)

  • Haré de ellos una sola nación en la tierra, en las montañas de Israel, y todos tendrán un solo rey: ya no formarán dos naciones ni estarán más divididos en dos reinos. (Ezequiel 37, 22)

  • Después de muchos días, se te encomendará una misión. Al cabo de los años, tú irás a un país restaurado de una masacre, a una nación congregada de entre pueblos numerosos en las montañas de Israel, que habrán estado en ruinas durante largo tiempo. Una vez que hayan sido sacados de entre los pueblos, todos ellos vivirán confiados. (Ezequiel 38, 8)

  • Por eso, yo doy este decreto: ‘Todo pueblo, nación o lengua que hable irreverentemente contra el Dios de Sadrac, Mesac y Abed Negó, será cortado en pedazos y su casa quedará reducida a un basural, porque no hay otro dios que pueda librar de esa manera’". (Daniel 3, 96)

  • Una vez quebrado este, los cuatro que surgieron en lugar de él son los cuatro reinos que surgirán de su nación, pero no con su misma fuerza. (Daniel 8, 22)

  • En aquel tiempo, se alzará Miguel, el gran Príncipe, que está de pie junto a los hijos de tu pueblo. Será un tiempo de tribulación, como no lo hubo jamás, desde que existe una nación hasta el tiempo presente. En aquel tiempo, será liberado tu pueblo: todo el que se encuentre inscrito en el Libro. (Daniel 12, 1)

  • Venderé a los hijos y a las hijas de ustedes, los entregaré a los hijos de Judá, y ellos los venderán a los sabeos, a una nación lejana, porque ha hablado el Señor. (Joel 4, 8)


“O Senhor sempre orienta e chama; mas não se quer segui-lo e responder-lhe, pois só se vê os próprios interesses. Às vezes, pelo fato de se ouvir sempre a Sua voz, ninguém mais se apercebe dela; mas o Senhor ilumina e chama. São os homens que se colocam na posição de não conseguir mais escutar.” São Padre Pio de Pietrelcina