Fundar 482 Resultados para: espíritu abatido

  • les decía: "No sé yo cómo habéis aparecido en mi seno, puesto que no he sido yo la que os ha dado el espíritu y la vida, ni la que unió los miembros de vuestro cuerpo. (II Macabeos 7, 22)

  • Dios, creador del mundo, que formó el género humano y ha creado cuanto existe, él os dará de nuevo el espíritu y la vida por su misericordia, ya que por sus santas leyes la despreciáis". (II Macabeos 7, 23)

  • se subió a una roca, y allí, casi sin sangre, se agarró los intestinos con ambas manos y los tiró sobre los soldados, pidiendo al Señor de la vida y del espíritu que un día se los devolviera; y así murió. (II Macabeos 14, 46)

  • Convertíos a mis exhortaciones; he aquí que yo derramaré sobre vosotros mi espíritu; yo os haré conocer mis palabras. (Proverbios 1, 23)

  • Un corazón contento alegra el semblante, un corazón triste abate el espíritu. (Proverbios 15, 13)

  • El preludio de la ruina es el orgullo; el preludio de la caída, el espíritu altanero. (Proverbios 16, 18)

  • Más vale ser humilde de espíritu con los pequeños que partir el botín con los soberbios. (Proverbios 16, 19)

  • Corazón alegre, excelente remedio; un espíritu abatido seca los huesos. (Proverbios 17, 22)

  • El espíritu del hombre le sostiene en su enfermedad; pero al espíritu abatido, ¿quién le sostendrá? (Proverbios 18, 14)

  • El orgullo del hombre causa su humillación, pero el humilde de espíritu obtiene el honor. (Proverbios 29, 23)

  • El espíritu del sabio va a su derecha, el del tonto a su izquierda. (Eclesiastés 10, 2)

  • Como tú no sabes por qué camino entra el espíritu en los huesos en el seno de una mujer encinta, así no conoces la obra de Dios, que hace todas las cosas. (Eclesiastés 11, 5)


“Nunca vá se deitar sem antes examinar a sua consciência sobre o dia que passou. Enderece todos os seus pensamentos a Deus, consagre-lhe todo o seu ser e também todos os seus irmãos. Ofereça à glória de Deus o repouso que você vai iniciar e não esqueça do seu Anjo da Guarda que está sempre com você.” São Padre Pio de Pietrelcina