Fundar 54 Resultados para: Enfermo

  • David le preguntó: "¿A quién perteneces y de dónde eres?". Él respondió: "Soy un joven egipcio, esclavo de un amalecita. Mi señor me abandonó hace tres días porque me puse enfermo. (I Samuel 30, 13)

  • Amnón andaba atormentado, hasta sentirse enfermo, por su hermana Tamar; pues siendo ella virgen, le resultaba difícil hacerle nada a ella. (II Samuel 13, 2)

  • Yonadab le dijo: "Acuéstate en tu cama y fíngete enfermo; y cuando venga tu padre a visitarte, le dirás: Que venga, por favor, mi hermana Tamar a darme de comer. Que ella prepare la comida delante de mí para que yo la vea y reciba el alimento de su mano". (II Samuel 13, 5)

  • Amnón se acostó y se fingió enfermo. El rey vino a visitarle, y le dijo: "Que venga, por favor, mi hermana Tamar; que prepare dos tortas delante de mí, y yo las tomaré de su mano". (II Samuel 13, 6)

  • En aquel tiempo enfermó Abías, hijo de Jeroboán, (I Reyes 14, 1)

  • Pero el Señor había dicho a Ajías: "Va a venir la mujer de Jeroboán a consultarte acerca de su hijo, que está enfermo. Le has de decir esto y esto". Ella entró fingiéndose otra. (I Reyes 14, 5)

  • El resto de la historia de Asá, todas sus proezas y todo lo que hizo, las ciudades que edificó, está escrito en el libro de los anales de los reyes de Judá. Únicamente que, en su vejez, estuvo enfermo de los pies. (I Reyes 15, 23)

  • Después de algún tiempo el hijo del ama de la casa cayó gravemente enfermo y murió. (I Reyes 17, 17)

  • Eliseo fue a Damasco. Ben Hadad, rey de Siria, que estaba enfermo, recibió la noticia de que había llegado el hombre de Dios. (II Reyes 8, 7)

  • Eliseo estaba enfermo de muerte. Joás, rey de Israel, fue a visitarlo; al verlo, se echó a llorar y decía: "¡Padre mío, padre mío, carro y caballería de Israel!". (II Reyes 13, 14)

  • Por aquel tiempo, Ezequías cayó gravemente enfermo; Isaías, hijo de Amós, el profeta, se presentó a él y le dijo: "Esto dice el Señor: Arregla los asuntos de tu casa, porque vas a morir; no curarás". (II Reyes 20, 1)

  • El año treinta y nueve de su reinado enfermó gravemente de los pies, y tampoco en su enfermedad confió en el Señor, sino en los médicos. (II Crónicas 16, 12)


“Para que se preocupar com o caminho pelo qual Jesus quer que você chegue à pátria celeste – pelo deserto ou pelo campo – quando tanto por um como por outro se chegará da mesma forma à beatitude eterna?” São Padre Pio de Pietrelcina