Fundar 5347 Resultados para: Dios y el hombre

  • El Señor Dios dijo a la serpiente: "Por haber hecho esto, maldita seas entre todos los ganados y entre todas las bestias del campo. Te arrastrarás sobre tu vientre y comerás del polvo de la tierra todos los días de tu vida. (Génesis 3, 14)

  • Al hombre le dijo: "Por haber hecho caso a tu mujer y por haber comido del árbol prohibido, maldita sea la tierra por tu culpa. Con trabajo sacarás de ella tu alimento todo el tiempo de tu vida. (Génesis 3, 17)

  • El hombre llamó Eva a su mujer, porque ella fue la madre de todos los vivientes. (Génesis 3, 20)

  • El Señor Dios hizo al hombre y a su mujer unas túnicas de piel y los vistió. (Génesis 3, 21)

  • Después dijo: "¡He ahí al hombre, que ha llegado a ser como uno de nosotros por el conocimiento del bien y del mal! ¡No vaya ahora a tender su mano y tome del árbol de la vida, y comiendo de él viva para siempre!". (Génesis 3, 22)

  • El Señor Dios lo expulsó del jardín de Edén para que trabajase la tierra de la que había sido sacado. (Génesis 3, 23)

  • Expulsó al hombre, y puso delante del jardín de Edén los querubines y la llama de la espada flameante para guardar el camino del árbol de la vida. (Génesis 3, 24)

  • El hombre tuvo relaciones con su mujer, Eva, la cual concibió, dio a luz a Caín y dijo: "He tenido un hombre gracias al Señor". (Génesis 4, 1)

  • Lamec dijo a sus mujeres: "Ada y Sila, escuchadme; mujeres de Lamec, prestad oído a mis palabras: Por una herida maté a un hombre, y a un joven por una contusión. (Génesis 4, 23)

  • Adán tuvo de nuevo relaciones con su mujer, y ésta dio a luz un hijo, a quien puso por nombre Set, "porque Dios, dijo, me ha dado otro descendiente en lugar de Abel, al que mató Caín". (Génesis 4, 25)

  • He aquí la lista de los descendientes de Adán. Cuando Dios creó al hombre lo hizo a imagen de Dios. (Génesis 5, 1)

  • Los creó macho y hembra, los bendijo y les puso el nombre de "hombre" el día de su creación. (Génesis 5, 2)


“Para mim, Deus está sempre fixo na minha mente e estampado no meu coração.” São Padre Pio de Pietrelcina