Encontrados 149 resultados para: veces

  • Yo echaré a las naciones delante de ti, ensancharé tus fronteras y nadie codiciará tu tierra cuando subas a presentarte ante el Señor, tu Dios, tres veces al año. (Exodo 34, 24)

  • Asperjará entonces siete veces al hombre que quiere ser purificado de la lepra y, una vez que lo haya declarado puro, dejará suelta en el campo el ave viva. (Levítico 14, 7)

  • y la rociará con el dedo por siete veces sobre el altar, purificándolo y santificándolo de las impurezas de los israelitas. (Levítico 16, 19)

  • Si todavía seguís obstinados contra mí y no me queréis obedecer, multiplicaré siete veces más mis castigos por vuestros pecados; (Levítico 26, 21)

  • que todos los que han visto mi gloria y los prodigios que he hecho en Egipto y en el desierto, los que me han puesto a prueba por diez veces y no me han obedecido, (Números 14, 22)

  • El sacerdote Eleazar tomará con su dedo de la sangre y rociará con ella siete veces hacia el frente de la tienda de la reunión. (Números 19, 4)

  • Y alzando el brazo hirió por dos veces la roca con el bastón, y brotaron de ella aguas en abundancia; bebió la multitud y sus ganados. (Números 20, 11)

  • Entonces el Señor abrió la boca de la burra, que dijo a Balaán: "¿Qué te he hecho yo para que me hayas pegado por tres veces?". (Números 22, 28)

  • El ángel del Señor le dijo: "¿Por qué has pegado a tu burra por tres veces? Era yo quien te cerraba el paso, pues me disgusta tu viaje. (Números 22, 32)

  • La burra me ha visto y por tres veces se ha apartado de mí. Gracias que se ha apartado, pues de otra manera te hubiera yo matado a ti, dejándola a ella con vida". (Números 22, 33)

  • Balaán vio que el Señor se complacía en bendecir a Israel, y no fue ya como las otras veces en busca de presagios, sino que se volvió de cara al desierto. (Números 24, 1)

  • Balac se enfureció contra Balaán y, dando palmadas, le dijo: "Te había llamado para maldecir a mis enemigos y los has bendecido ya por tres veces. (Números 24, 10)


“Não se aflija a ponto de perder a paz interior. Reze com perseverança, com confiança, com calma e serenidade.” São Padre Pio de Pietrelcina