Encontrados 96 resultados para: tesoro escondido

  • pero ésta había tomado los ídolos y los había escondido debajo de la albarda del camello, sentándose encima de ellos. Labán rebuscó por toda la tienda, pero no los encontró. (Génesis 31, 34)

  • Y él les dijo: "Estad tranquilos, no temáis. Fue vuestro Dios y el Dios de vuestro padre el que puso un tesoro en vuestros sacos; yo recibí vuestro dinero". Y les sacó a Simeón. (Génesis 43, 23)

  • La mujer concibió y dio a luz un hijo, y al ver que era muy hermoso, lo tuvo escondido por espacio de tres meses. (Exodo 2, 2)

  • Más aún, el Señor, tu Dios, enviará tábanos contra ellos hasta hacer perecer a los sobrevivientes o a los que se hubieran escondido. (Deuteronomio 7, 20)

  • El Señor abrirá para ti su maravilloso tesoro, los cielos, para dar a su tiempo la lluvia a tu tierra y bendecir las obras de tus manos. Prestarás a muchas gentes y de nadie tomarás prestado. (Deuteronomio 28, 12)

  • Pero ella los había hecho subir a la azotea y los había escondido entre las cañas de lino que tenía allí. (Josué 2, 6)

  • Toda la plata y el oro, todos los objetos de bronce y de hierro serán consagrados al Señor y entrarán en su tesoro". (Josué 6, 19)

  • Después quemaron la ciudad y todo lo que había en ella, a excepción de la plata, el oro y los objetos de bronce y de hierro, que se depositaron en el tesoro de la casa del Señor. (Josué 6, 24)

  • Josué perdonó la vida a Rajab, la prostituta, y a su familia, con todo lo que tenían. Ella vivió con los israelitas hasta el día de hoy por haber escondido a los espías enviados por Josué para explorar la tierra. (Josué 6, 25)

  • Israel ha pecado, ha violado la alianza que hice con ellos; han tomado cosas que estaban consagradas al exterminio, han robado, han mentido y las han escondido entre sus enseres. (Josué 7, 11)

  • Entonces Josué envió unos mensajeros, que fueron corriendo hacia la tienda y encontraron lo que en ella estaba escondido, y el dinero debajo. (Josué 7, 22)

  • Pero, al ponerse el sol, Josué mandó descolgarlos y echarlos en la cueva donde se habían escondido. Y pusieron grandes piedras en la entrada de la cueva, y allí están todavía hoy. (Josué 10, 27)


“Há alegrias tão sublimes e dores tão profundas que não se consegue exprimir com palavras. O silêncio é o último recurso da alma, quando ela está inefavelmente feliz ou extremamente oprimida!” São Padre Pio de Pietrelcina