Encontrados 205 resultados para: oído
Yo te llamo porque tú me respondes, oh Dios mío; tiende hacia mí tu oído, escucha mis palabras. (Salmos 17, 6)
Escucha, Señor, mi grito suplicante; presta oído a mis llantos y no te hagas el sordo, pues yo soy un invitado tuyo; un huésped, como todos mis padres. (Salmos 39, 13)
Tú no quieres sacrificios ni ofrendas, no pides holocaustos ni sacrificios por el pecado; en cambio, me has abierto el oído, (Salmos 40, 7)
Oh Dios, hemos oído con nuestros oídos, nos han contado nuestros padres la obra que en sus días hiciste, en los días antiguos, con tu propia mano. (Salmos 44, 2)
Lo que habíamos oído lo hemos visto en la ciudad del Señor omnipotente, en la ciudad de nuestro Dios: Dios la ha afirmado para siempre. (Salmos 48, 9)
mi oído está atento a los proverbios, al son de la cítara resuelvo los enigmas. (Salmos 49, 5)
Tarde, mañana y mediodía gimo y suspiro; él ha oído mis gritos, (Salmos 55, 18)
están envenenados con veneno de víbora, sordos como el áspid que se tapa el oído (Salmos 58, 5)
Dios ha dicho una cosa, y luego otra; yo lo he oído; (Salmos 62, 12)
Lo que hemos oído y aprendido, lo que nuestros padres nos contaron, (Salmos 78, 3)
Mis ojos observan a los que me espían y mi oído oye a los malvados que se alzan contra mí. (Salmos 92, 12)
porque me presta oído siempre que lo invoco. (Salmos 116, 2)