Encontrados 132 resultados para: mismos

  • Esto dice el Señor todopoderoso, Dios de Israel, acerca de Ajab, hijo de Colayas, y de Sedecías, hijo de Masías, que os profetizan mentiras en mi nombre: "Yo los entregaré en manos de Nabucodonosor, rey de Babilonia, que les dará muerte a vuestros mismos ojos. (Jeremías 29, 21)

  • Ahora, pues, esto dice el Señor todopoderoso, Dios de Israel: ¿Por qué cometéis tanto mal contra vosotros mismos? Vais a terminar exterminando del seno de Judá a hombres, mujeres, niños y lactantes, hasta que no quede rastro de vosotros, (Jeremías 44, 7)

  • Les encienden lámparas y en número mayor que para ellos mismos; pero de ellas los dioses no ven ni una sola. (Baruc 6, 18)

  • Si se les pone derechos, no pueden moverse por sí mismos; si se les inclina, no logran enderezarse solos; como delante de cadáveres, se les presentan las ofrendas. (Baruc 6, 26)

  • Los mismos caldeos los desacreditan: cuando ven a un mudo que no puede hablar, se lo presentan a Bel, pidiéndole que le haga hablar; ¡como si este dios pudiera oír! (Baruc 6, 40)

  • Los mismos autores no duran mucho tiempo; por tanto, ¿cómo van a ser dioses los fabricados por ellos? (Baruc 6, 46)

  • No pueden defenderse de ladrones ni de salteadores estos dioses de madera, plateados o dorados; aquéllos, más fuertes que ellos, les quitan el oro, la plata y los vestidos que los recubren, y se van con ello sin que los dioses puedan socorrerse a sí mismos. (Baruc 6, 57)

  • Por la púrpura y el lino, que se pudre encima de ellos, conoceréis también que no son dioses. Finalmente, ellos mismos serán carcomidos y quedarán hechos una vergüenza en el país. (Baruc 6, 71)

  • y de estos mismos tomarás todavía unos pocos, los echarás al fuego y los quemarás en él. De aquí saldrá el fuego. Y dirás a toda la casa de Israel: (Ezequiel 5, 4)

  • Entonces los supervivientes se acordarán de mí en medio de las naciones donde sean deportados. Yo quebrantaré su corazón adúltero, que se apartó de mí, y sus ojos prostituidos ante sus ídolos. Tendrán horror de sí mismos por las perversidades que cometieron a causa de todas sus horribles acciones. (Ezequiel 6, 9)

  • Aquellos seres eran los mismos que yo había visto debajo del Dios de Israel, junto al río Quebar, y comprendí que eran querubines. (Ezequiel 10, 20)

  • Entonces os acordaréis de vuestra conducta, de todas las acciones con las cuales os manchasteis, y sentiréis asco de vosotros mismos por todas las injusticias que habéis cometido. (Ezequiel 20, 43)


“Tenhamos sempre horror ao pecado mortal e nunca deixemos de caminhar na estrada da santa eternidade.” São Padre Pio de Pietrelcina