Encontrados 869 resultados para: espada del Espíritu

  • A vuestros supervivientes les infundiré tal espanto en sus corazones cuando se encuentren en la tierra de sus enemigos, que el movimiento de una hoja los espantará, los hará huir, como se huye delante de la espada, y caerán sin que nadie los persiga. (Levítico 26, 36)

  • Tropezarán y caerán unos sobre otros, como cuando se huye delante de la espada, sin que sean en realidad perseguidos. No podréis resistir ante vuestros enemigos, (Levítico 26, 37)

  • Yo bajaré, hablaré contigo y tomaré una parte del espíritu que tú tienes y se la daré a ellos para que compartan contigo el peso de este pueblo y no lo lleves tú solo. (Números 11, 17)

  • El Señor bajó en la nube y habló a Moisés. Tomó una parte del espíritu que tenía Moisés y se la dio a los setenta ancianos. Cuando el espíritu se posó sobre ellos se pusieron a profetizar, pero no continuaron. (Números 11, 25)

  • Dos de ellos habían permanecido en el campamento: uno se llamaba Eldad y otro Medad. También sobre ellos se posó el espíritu, ya que pertenecían a los elegidos, aunque no se habían presentado en la tienda, y se pusieron a profetizar en el campamento. (Números 11, 26)

  • Moisés le respondió: "¿Tienes celos de mí? ¡Ojalá que todo el pueblo del Señor profetizara y el Señor les diera su espíritu!". (Números 11, 29)

  • ¿Por qué nos lleva el Señor a esa tierra a morir bajo la espada y entregar nuestras mujeres y nuestros hijos como botín de guerra? ¿No sería mejor volver a Egipto?". (Números 14, 3)

  • Pero a mi siervo Caleb, que está animado de otro espíritu y me ha obedecido fielmente, lo llevaré a la tierra en la que ha estado, y su descendencia la poseerá. (Los amalecitas y los cananeos habitaban entonces la llanura). (Números 14, 24)

  • Cayeron sobre sus rostros y dijeron: "¡Oh, Dios, Dios del espíritu de todo viviente! ¿Ha pecado uno solo, y tú te irritas contra toda la comunidad?". (Números 16, 22)

  • El que toque en el campo un hombre muerto por la espada o un muerto cualquiera, o huesos humanos, quedará impuro durante siete días. (Números 19, 16)

  • Israel lo derrotó al filo de la espada, y conquistó su territorio desde el Arnón hasta el Yaboc, hasta los amonitas, pues Yahás estaba en la frontera de los amonitas. (Números 21, 24)

  • La burra, al ver al ángel del Señor apostado en el camino con la espada desenvainada en la mano, se salió del camino y tiró por el campo. Balaán le pegaba para hacerla volver al camino. (Números 22, 23)


“Imitemos o coração de Jesus, especialmente na dor, e assim nos conformaremos cada vez mais e mais com este coração divino para que, um dia, lá em cima no Céu, também nós possamos glorificar o Pai celeste ao lado daquele que tanto sofreu”. São Padre Pio de Pietrelcina