Encontrados 235 resultados para: confesión de pecados

  • En efecto, el cuerpo de las víctimas, cuya sangre introduce el sumo sacerdote en el santuario para el rito de la absolución de los pecados, es quemado fuera del campamento. (Hebreos 13, 11)

  • La oración hecha con fe salvará al enfermo, y el Señor lo restablecerá y le serán perdonados los pecados que haya cometido. (Santiago 5, 15)

  • Confesaos los pecados unos a otros y rezad unos por otros, para que os curéis. La oración fervorosa del justo tiene un gran poder. (Santiago 5, 16)

  • sabed que el que hace volver a un pecador de su camino equivocado le salva de la muerte y hace desaparecer una multitud de pecados. (Santiago 5, 20)

  • él que llevó en su propio cuerpo nuestros pecados sobre la cruz para que, muertos para el pecado, vivamos para la justicia: por sus heridas hemos sido curados. (I Pedro 2, 24)

  • Pues también Cristo murió una vez por los pecados el justo por los injustos, con el fin de llevarnos a Dios. Sufrió la muerte corporal, pero fue devuelto a la vida espiritual; (I Pedro 3, 18)

  • Ante todo amaos ardientemente unos a otros, pues el amor alcanza el perdón de todos los pecados. (I Pedro 4, 8)

  • Al contrario, el que carece de ellas es ciego y miope, que se ha olvidado de purificar sus antiguos pecados. (II Pedro 1, 9)

  • Si confesamos nuestros pecados, Dios, que es justo y fiel, nos perdona nuestros pecados y nos purifica de toda injusticia. (I Juan 1, 9)

  • Él se ofrece en expiación por nuestros pecados; y no sólo por los nuestros, sino por los de todo el mundo. (I Juan 2, 2)

  • Hijos míos, os escribo porque se os han perdonado los pecados por su nombre. (I Juan 2, 12)

  • Y sabéis que él se ha manifestado para quitar los pecados, y que no hay pecado en él. (I Juan 3, 5)


“O Senhor nos dá tantas graças e nós pensamos que tocamos o céu com um dedo. Não sabemos, no entanto, que para crescer precisamos de pão duro, das cruzes, das humilhações, das provações e das contradições.” São Padre Pio de Pietrelcina