Encontrados 323 resultados para: Muchos

  • No obstante, tú los soportaste muchos años, los amonestaste con tu espíritu por medio de los profetas, pero no hicieron caso. Entonces los entregaste en manos de los pueblos del país. (Nehemías 9, 30)

  • Aquel día se ofrecieron muchos sacrificios entre la alegría general, pues Dios les había dado un motivo de gran alegría. También las mujeres y los niños se regocijaron, de modo que la alegría de Jerusalén se oía desde lejos. (Nehemías 12, 43)

  • Di sepultura también a los que mató Senaquerib a su vuelta de Judea, después de la derrota propinada por el rey del cielo a aquel blasfemo. Rabioso, mató a muchos israelitas; y yo escondía sus cadáveres, y luego los enterraba. Senaquerib los buscó, pero no pudo encontrarlos. (Tobías 1, 18)

  • Se celebró la boda con gran regocijo durante siete días, en los que se recibieron muchos regalos. (Tobías 11, 20)

  • Vete, hijo mío, de Nínive; no te quedes aquí. El día en que entierres a tu madre junto a mí, pasa los límites de Nínive. Yo sé bien que se cometen muchas injusticias y muchos fraudes sin avergonzarse por ello. (Tobías 14, 9)

  • Se unieron a él todos los habitantes de la montaña, los de las riberas del Éufrates, del Tigris y del Hidaspes, y los vasallos de Arioc, rey de Elán; eran, pues, muchos los pueblos alistados contra los descendientes de Jeleud. (Judit 1, 6)

  • Tuvo muchos pretendientes, pero ella no quiso casarse desde que su marido Manasés murió, y fue a reunirse con su pueblo. (Judit 16, 22)

  • Quería, con esto, poner de manifiesto durante muchos días, ciento ochenta exactamente, la riqueza y gloria de su imperio, el fasto y esplendor de su magnificencia. (Ester 1, 4)

  • En todas las provincias y lugares donde fue publicado el edicto del rey no había más que luto, ayunos, lloros y lamentos por parte de los judíos. El saco y las cenizas fueron el lecho de muchos. (Ester 4, 3)

  • En las provincias y poblaciones adonde llegaban las órdenes del decreto real tuvieron los judíos alegría y gozo, convites y fiestas. Muchos se hacían judíos por el miedo que les tenían. (Ester 8, 17)

  • El rey dio un cargo a Mardoqueo en palacio y en agradecimiento le hizo muchos regalos. (Ester 12, 5)

  • Muchos, inmensamente honrados por la abundante largueza de sus bienhechores, llegaron a ensoberbecerse. (Ester 16, 2)


“Amar significa dar aos outros – especialmente a quem precisa e a quem sofre – o que de melhor temos em nós mesmos e de nós mesmos; e de dá-lo sorridentes e felizes, renunciando ao nosso egoísmo, à nossa alegria, ao nosso prazer e ao nosso orgulho”. São Padre Pio de Pietrelcina