Encontrados 897 resultados para: espada del Espíritu

  • Y después de expulsar al hombre, puso al oriente del jardín de Edén a los querubines y la llama de la espada zigzagueante, para custodiar el acceso al árbol de la vida. (Génesis 3, 24)

  • Entonces el Señor dijo: "Mi espíritu no va a permanecer activo para siempre en el hombre, porque este no es más que carne; por eso no vivirá más de ciento veinte años". (Génesis 6, 3)

  • Vivirás de tu espada y servirás a tu hermano. Pero cuando te rebeles, lograrás sacudir su yugo de tu cuello". (Génesis 27, 40)

  • Al tercer día, cuando todavía estaban convalecientes, Simeón y Leví, dos de los hijos de Jacob, hermanos de Dina, empuñaron cada uno su espada, entraron en la ciudad sin encontrar ninguna resistencia, y mataron a todos los varones. (Génesis 34, 25)

  • También pasaron al filo de la espada a Jamor y a su hijo Siquém, rescataron a Dina, que estaba en la casa de Siquém, y se fueron. (Génesis 34, 26)

  • Por eso el Faraón les dijo a estos: "¿Podemos encontrar otro hombre que tenga en igual medida el espíritu de Dios?". (Génesis 41, 38)

  • Entonces le repitieron todo lo que les había dicho José y, al ver los carros que le había enviado para transportarlo, su espíritu revivió. (Génesis 45, 27)

  • Yo, por mi parte, te doy una franja de tierra más que a tus hermanos, la que arrebaté a los amorreos con mi espada y con mi arco". (Génesis 48, 22)

  • Ellos dijeron: "El Dios de los hebreos vino a nuestro encuentro, y ahora tenemos que realizar una marcha de tres días por el desierto, para ofrecer sacrificios al Señor, nuestro Dios. De lo contrario él nos castigará con la peste o la espada". (Exodo 5, 3)

  • les dijeron: "Que el Señor fije su mirada en ustedes y juzgue. Porque nos han hecho odiosos al Faraón y a sus servidores, y han puesto en sus manos una espada para que nos maten". (Exodo 5, 21)

  • El enemigo decía: ‘Los perseguiré, los alcanzaré, repartiré sus despojos, saciaré mi avidez, desenvainaré la espada, mi mano los destruirá’. (Exodo 15, 9)

  • De esa manera, Josué derrotó a Amalec y a sus tropas al filo de la espada. (Exodo 17, 13)


“Proponha-se a exercitar-se nas virtudes”. São Padre Pio de Pietrelcina