25. Daniel respondió: "Yo adoro al Señor, mi Dios, porque es él el Dios vivo. Oh rey, dame licencia, y yo mataré a este dragón sin espada ni estaca".





“O Senhor se comunica conosco à medida que nos libertamos do nosso apego aos sentidos, que sacrificamos nossa vontade própria e que edificamos nossa vida na humildade.” São Padre Pio de Pietrelcina