11. Tobías fue a su encuentro con la hiel del pez en la mano; le sopló en los ojos, lo abrazó y le dijo: "Ánimo, padre". Después le aplicó el remedio, que le provocó escozor.





“É difícil tornar-se santo. Difícil, mas não impossível. A estrada da perfeição é longa, tão longa quanto a vida de cada um. O consolo é o repouso no decorrer do caminho. Mas, apenas restauradas as forças, é necessário levantar-se rapidamente e retomar a viagem!” São Padre Pio de Pietrelcina