16. Entonces Juan accedió a ello. Una vez bautizado, Jesús salió del agua; y en esto los cielos se abrieron y vio al Espíritu de Dios descender en forma de paloma y posarse sobre él.





O maldito “eu” o mantém apegado à Terra e o impede de voar para Jesus. São Padre Pio de Pietrelcina