1. El año sexto, el día cinco del sexto mes, estando en mi casa rodeado de los ancianos de Judá, el Señor puso su mano sobre mí.





“O Senhor se comunica conosco à medida que nos libertamos do nosso apego aos sentidos, que sacrificamos nossa vontade própria e que edificamos nossa vida na humildade.” São Padre Pio de Pietrelcina