Znaleziono 167 Wyniki dla: Ofrendas

  • No digas: "Dios considerará la multitud de mis ofrendas; cuando yo se las ofrezca al Dios altísimo, las recibirá". (Eclesiástico 7, 9)

  • Hijo, en la medida de lo posible, trátate bien, y presta al Señor las ofrendas debidas. (Eclesiástico 14, 11)

  • Manjares derramados sobre boca cerrada, tales son las ofrendas a los ídolos. (Eclesiástico 30, 18)

  • El que hace una ofrenda de lo adquirido con injusticias hace una ofrenda defectuosa. Las ofrendas de los que practican la injusticia no son aceptables. (Eclesiástico 34, 18)

  • El altísimo no se complace en las ofrendas de los que practican la injusticia, ni por la multitud de los sacrificios perdona los pecados. (Eclesiástico 34, 19)

  • El que guarda la ley multiplica las ofrendas, el que observa los mandamientos ofrece sacrificios de reconciliación. (Eclesiástico 35, 1)

  • No intentes sobornarlo, que no recibirá tus dones; y no te confíes en ofrendas de cosas adquiridas con injusticias. (Eclesiástico 35, 11)

  • para traerme ofrendas vanas; me causa horror su incienso. Novilunios, sábados, asambleas..., ¡ya no soporto más sacrificios ni fiestas! (Isaías 1, 13)

  • Entonces presentará ofrendas al Señor omnipotente el pueblo espigado y bronceado, el pueblo temido desde siempre, la gente robusta y dominante, cuya tierra está surcada de ríos, en el lugar donde reside el nombre del Señor omnipotente, el monte Sión. (Isaías 18, 7)

  • El Señor se manifestará a Egipto; Egipto conocerá al Señor aquel día: le honrará con sacrificios y ofrendas, hará votos al Señor y los cumplirá. (Isaías 19, 21)

  • No me has ofrecido corderos en holocausto, ni me has honrado con tus sacrificios. Yo no te forcé a hacerme ofrendas, no he insistido en que me ofrecieras incienso. (Isaías 43, 23)

  • Las piedras pulidas del torrente son tu heredad, ellas, ellas tu suerte. A ellas haces tus ofrendas de vino y presentas tus ofrendas; ¿voy a calmarme yo con eso? (Isaías 57, 6)


“Aquele que procura a vaidade das roupas não conseguirá jamais se revestir com a vida de Jesus Cristo.” São Padre Pio de Pietrelcina