16. ¡Viva el Señor, que me ha protegido en el camino recorrido! Mi rostro lo sedujo para su perdición. Pero no pudo pecar conmigo, lo que hubiera sido mi profanación y mi deshonra".





“Não sejamos mesquinhos com Deus que tanto nos enriquece.” São Padre Pio de Pietrelcina