18. Como en la destrucción de Sodoma y Gomorra y de las ciudades vecinas -dice el Señor-, no quedará allí nadie, ni un alma volverá a vivir allí.





“O Senhor se comunica conosco à medida que nos libertamos do nosso apego aos sentidos, que sacrificamos nossa vontade própria e que edificamos nossa vida na humildade.” São Padre Pio de Pietrelcina