23. Él prosiguió: "Ocurra lo que ocurra, yo voy corriendo". Joab le dijo: "Pues, ¡hala!, corre". Ajimás corrió por el camino de la llanura y adelantó al cusita.





“É necessário manter o coração aberto para o Céu e aguardar, de lá, o celeste orvalho.” São Padre Pio de Pietrelcina